Egipto fue escenario de importantes pasajes bíblicos. José, hijo de Jacob, fue enviado allí, después de ser vendido por sus hermanos (lea desde Génesis 37) y revolucionó la administración local en un gran ejemplo de planeamiento cuando Dios lanzó sobre el reino las famosas plagas. Allí el pueblo judío fue esclavizado durante generaciones hasta salir con Moisés hacia la Tierra Prometida (libro de Éxodo). Hoy, es un importante país de Medio Oriente y posee en su territorio algunas de las obras arquitectónicas e históricas más valiosas de la humanidad.
Este país árabe, limita al oeste con Libia, al sur con Sudán, al este con Franja de Gaza e Israel, al norte con el Mar Mediterráneo y del lado oriental con el Mar Rojo. A la Península del Sinaí la bañan dos golfos: el de Suez y el de Acaba.
Es uno de los países africanos más poblados, tiene más de 80 millones de habitantes y prácticamente todos viven sobre las márgenes del histórico Rio Nilo. El resto del territorio tiene clima desértico y tierras pobres. Sus desiertos son el de Libia, el Oriental (o Arábico) – ambos parten del Sahara – y el Sinaí. Casi la mitad de los habitantes viven en la zona urbana.
Historia
Los indicios más antiguos de habitantes en Egipto datan del período Paleolítico, los restos fueron encontrados en las márgenes del Nilo y en los oasis. Incluso se piensa que la cuna de la Humanidad se encontró al sur del Sahara y desde allí los primeros hombres se extendieron a otras latitudes; por lo tanto, ¿cómo pudieron atravesar el desierto cálido más grande del mundo? Las pinturas rupestres del Sahara hablan de una fauna de cocodrilos y otros seres ya desaparecidos de la región como hipopótamos, elefantes y jirafas.
Según las pinturas rupestres en esta época el Sahara llegó a tener una vegetación capaz de sustentar también ganado bovino. Hay diversas teorías sobre si el Sahara se desertificó en miles de años o en cientos. Pero sea como fuera, lo cierto es que es el cambio climático más drástico encontrado en la historia. Estos cambios climáticos sucedieron 8 mil años antes de Cristo.
Los pueblos de la época migraron al Valle del Nilo y desarrollaron la agricultura, pues las tierras en las proximidades del curso del agua son fértiles hasta hoy, como consecuencia de sus inundaciones y de la materia orgánica que transportan. Además, el clima cerca del río es más ameno que en el resto del país desértico.
En el 6000 a.C., la agricultura egipcia estaba organizada y comenzaron a erguirse grandes edificaciones. El Bajo y el Alto Egipto eran comunidades independientes, pero con buenas relaciones entre sí. En el 3150 a.C, el rey Menes unificó los reinos y dio origen a una dinastía que reinaría los siguientes 3 mil años. En el Imperio Antiguo (del 2700 a 2200 a.C.) surgieron las Grandes Pirámides y la Gran Esfinge. El Imperio Nuevo ( del 1550 a 1070 a.C.) comenzó con la 18ª Dinastía y llevó a Egipto a ser una potencia mundial de la época, expandiendo su territorio hasta la antigua Levante.
Levante mediterráneo ha sido una zona comercial por excelencia, con distintas rutas comerciales uniendo la costa y Egipto con los países del Oriente Medio, lo que también ha provocado que fuese durante siglos el escenario de distintos conflictos bélicos entre los pueblos que intentaban mantener el control del comercio.
De este período son algunos de los faraones (reyes con status de dioses) más conocidos, como Akenatón, (y su famosa esposa Nefertiti, eternizada en las artes por su belleza), Tutankamon y Ramsés II. Su politeísmo, con una rica mitología, dio lugar al monoteísmo, con el atonismo. Ésta fue la primera religión monoteísta de la historia, favoreciendo el culto al disco solar Atón.
La 30ª Dinastía fue la última dinastía egipcia de nacimiento, ya que el reino fue conquistado por los griegos y, poco después por los romanos, dando como resultado más de 2 mil años de dominio extranjero. El cristianismo entró en Egipto a través de Marcos, el primer siglo d.C., época de la llamada Iglesia Primitiva, que aun tenía en boga las enseñanzas Cristo sin adulteraciones. El Imperio Romano dio lugar al Bizantino, período en que los cristianos comenzaron a ser perseguidos. El Nuevo Testamento fue traducido al egipcio en este mismo período.
En el año 639, Egipto fue tomado por los árabes musulmanes sunitas. Los gobernantes eran escogidos por los Califas (sucesores de Mahoma con poder político y religioso), permaneciendo en el poder cerca de 600 años.
Siglos después, en 1798, era la oportunidad de las tropas francesas de Napoleón Bonaparte, quien invadió el país impactando la cultura irreversiblemente. Después de la retirada francesa, varias facciones locales lucharon por el poder, pero éste permaneció entre los egipcios.
Desde el final del Siglo 19, a los días de hoy…
En 1869 fue inaugurado el famoso Canal de Suez, una vía artificial de navegación, que une el mar Mediterráneo con el mar Rojo, entre África y Asia haciendo de la región, un punto muy importante mundialmente en cuanto al comercio y al transporte. En algo más de dos años se excavaron más de 50 millones de metros cúbicos, de los 75 millones del total de la obra. Así fue que Egipto contrajo pesadas deudas al realizar una de las mayores obras de ingeniería en todo el planeta para la época.
El Reino Unido, su mayor acreedor, intervino y se aprovechó de la situación para dominar el país militarmente y en 1914, los británicos declararon el protectorado de Egipto. Pasado algunos años, los egipcios comenzaron a rebelarse contra el poderío extranjero, incitando grandes sublevaciones que llevaron a la independencia del país el 22 de febrero de 1922. Pero los británicos aún controlaban el importante canal ofreciendo, “a cambio”, la defensa del territorio.
La monarquía cayó en 1953 y fue proclamada la república. En julio de 1956, el Canal de Suez fue nacionalizado. En la década siguiente, con la histórica Guerra de los Seis Días, Israel invadió la península del Sinaí. En 1973, en la Guerra de Octubre (o de Yom Kippur), Egipto tomó la península del Sinaí nuevamente en un ataque sorpresa. Los Estados Unidos y la entonces, Unión Soviética intervinieron y negociaron el cese del fuego.
A cambio de la paz con Israel, el Sinaí fue reintegrado a Egipto. En 1979, un tratado de paz oficial estipuló la retirada permanente de los israelitas de la región. Los fundamentalistas islámicos no quisieron el tratado y asesinaron al entonces presidente egipcio Anwar Sadat en un desfile militar del Cairo, en 1981. Su sucesor, Hosni Mubarak, permanece en el poder hasta hoy después de múltiples reelecciones. La elección democrática es un cebo disfrazado de democracia, y Egipto es blanco de severas críticas en cuanto a la violación de los derechos humanos, por organizaciones como Amnistía Internacional y Human Rights Watch.
El Turismo
Es muy común, en un paseo a Egipto, comenzar por Israel. En la tierra de David hay solo una agencia especializada en turismo hacia el país vecino. Las excursiones salen de Tel Aviv y Jerusalén, y se puede llegar a Egipto en ómnibus o avión. El paquete para quien va en ómnibus cuesta, 300 dólares promedio e incluye el viaje hasta el Cairo y dos estadías con desayuno, en un hotel 4 estrellas. Los paseos se pagan por separado, con descuento del 50% para estudiantes y ancianos.
El Cairo
El viaje en ómnibus al Cairo, desde Jerusalén, dura 16 horas promedio. Es una verdadera aventura. La ruta es una recta en medio del desierto del Sinaí, no hay señalizaciones ni vestigios de civilización. Solo hay una parada, en una especie de bar muy simple en el desierto, en el cual no se recomienda comer nada sino llevar una vianda personal para el viaje.
En la capital egipcia, el tránsito es caótico, tiene muchas calles en pendiente, y la gran expansión de la ciudad, sin ningún tipo de planeamiento urbano, son algo inesperado para una ciudad con tantos años. Hay una ley que exime a los ciudadanos de pagar impuestos por construcciones inconclusas, por lo cual es común ver muchos inmuebles eternamente en construcción, lo que empeora el paisaje del caos.
La religión predominante en Egipto es el islamismo, aunque haya una minoría cristiana. La forma de orar del musulmán, arrodillándose y apoyando la cabeza en el suelo, dio origen a una costumbre singular. Quien tiene la marca más violeta en la frente, demuestra que golpeó su cabeza en el suelo con más fuerza; esto, en su concepción, simboliza mayor fe e inspira más respeto.
En la gastronomía tradicional, se destaca el kushari, un alimento hecho de arroz con lentejas, salsa de tomate, fideos y cebolla picada y frita arriba… muy rico. Un plato de estas características cuesta aproximadamente 2 dólares. Está también o kerkedé, un té frío de gusto fuerte, preparado con pétalos de hibisco. Vendedores ambulantes comercializan el té en las calles, y también es servido como cortesía en muchos comercios, con el objetivo de recibir y agradar a feligreses.
Sin embargo, se debe tener mucho cuidado, hay que elegir bien dónde comer en Egipto porque el agua en el Cairo está contaminada. Bajo ninguna circunstancia beba agua de la canilla– es importante comprar botellas de agua mineral, y evitar el consumo de frutas (cuando no se sabe el origen) porque el mismo motivo.
El shuk (o feria local) es una de las mayores de Medio Oriente. Es posible comprar desde bijouterie, ropa, calzado, tejidos, comidas, especias, souvenirs, y se pueden comprar incluso, camellos. Un “guía del shuk” acompaña a los turistas,(contra su voluntad) y se comunica en su idioma.
Las pirámides
Las Pirámides de Egipto ocupan la primera posición en la lista de las siete maravillas del mundo antiguo, y son las únicas de las antiguas maravillas que aún perduran. Visitarlas es uno de los paseos obligatorios según los especialistas del turismo y la historia. Ubicadas en el altiplano de Gizé, son fácilmente avistadas desde cualquier parte del Cairo.