«Si hemos esperado en Cristo para esta vida solamente, somos, de todos los hombres, los más dignos de lástima». 1 Corintios 15:19
«… antes que se rompa el hilo de plata, se quiebre el cuenco de oro, se rompa el cántaro junto a la fuente, y se haga pedazos la rueda junto al pozo; entonces volverá el polvo a la tierra como lo que era, y el espíritu volverá a Dios que lo dio». Eclesiastés 12:6-7