Micaela, antes de conocer la Iglesia Universal, había escuchado diversas opiniones que la hacían dudar sobre lo que ocurría allí. “Me decían muchas cosas, como por ejemplo que era mentira lo que hablaban allí, que los pastores te sacaban la plata, que no era verdad que la gente cambiaba”, detalla.
“En ese entonces, me encontraba muy mal, metida en los vicios de las drogas y el alcohol. Cuando quise dejarlos, sufrí trastorno de ansiedad. El médico me había recetado pastillas porque estaba muy ansiosa por consumir”, recuerda.
EL MOMENTO DE LA VERDAD
En medio de tantas dificultades que atravesaba, decidió hacer oídos sordos a las críticas que había escuchado y se acercó a unas de las reuniones. “Probé y toda mi vida cambió”, asegura y agrega: “Estaba depresiva y me quería quitar la vida. Cuando llegué, sentí algo distinto”.
Ella recuerda que se encontraba “muy cansada” de todas esas situaciones que atravesaba y que también afectaba a sus seres queridos. “Por eso, cuando llegué a la iglesia, dije: ‘Algo tiene que cambiar’”, señala y explica: “Busqué a Dios de todo corazón para poder salir adelante. Deseaba una transformación porque mi familia y mis hijos también sufrían a causa de la mala vida que llevaba”.
UNA NUEVA HISTORIA
Gracias a ese paso de fe, Micaela logró que su destino cambiara. “Ahora, todo es diferente. Estoy bien, libre de los vicios, del alcohol, de la ansiedad y ya no necesito tomar más medicación. Además, mi economía también cambió”, resalta.
Así fue como comprobó que todo lo que había escuchado antes no era verdad. “Me di cuenta de que lo que muchos dicen acerca de la Iglesia Universal es mentira, porque fui, probé y descubrí que es todo lo contrario. Gracias a Dios, estoy muy bien”, concluye.
AHORA, ES TU TURNO
Si, al igual que Micaela, escuchaste muchas críticas acerca de la Iglesia Universal, es hora de que descubras la verdad.
Acercate a la Universal más próxima a tu domicilio y participá de una de las reuniones. Encontrarás las puertas abiertas todos los días y personas dispuestas a escucharte. ¡Te esperamos!
Micaela asiste a la Iglesia Universal ubicada en Hipólito Yrigoyen 317, La Rioja.