¿Cuántas veces ya pensó en desistir? ¿En dejarlo todo, armar las valijas y simplemente irse? ¿En dejar atrás a los problemas, a los miedos, al trabajo, y solo explorar un mundo desconocido en búsqueda de la felicidad?
En algún momento, ese pensamiento pasa por la cabeza de casi todos nosotros, cuando luchar es difícil y las ganas de “tirar la toalla” son más fuertes. Algunas personas realmente arriesgan irse y encuentran la felicidad. Otras arriesgan y aprenden de una forma difícil que siempre hay algo más que perder.
Actualmente existe un grupo de 100 personas que se esfuerzan por dejarlo todo, todo de verdad, incluso a la humanidad, a la Tierra, a la vida. Ellos quieren ir a Marte.
Misión suicida
El reality show, promovido por el proyecto Mars One, una iniciativa privada, pretende seleccionar y enviar a 24 civiles a Marte en el 2023, para colonizar el planeta rojo. Serán aproximadamente 8 meses de viaje en una nave de 20 metros cúbicos (m3), racionando 3 mil litros de agua, 800 kilos de comida (kg) y 700 kg de oxígeno, hasta que lleguen al planeta rojo. El problema de este premio es: el pasaje es solo de ida.
La tecnología desarrollada para cuando los primeros vencedores dejen la Tierra no permite el regreso. Es decir: el que gane el programa, muere allí.
El equipo de Mars One asegura que la tecnología disponible ya permite viajar a Marte y sobrevivir allí. Además de eso, las naves transportarían el abastecimiento de la Tierra en intervalos regulares hacia el planeta. El Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), en los Estados Unidos, difundió, sin embargo, un estudio afirmando que la vida en Marte duraría, como mucho, 68 días. Esto si los pasajeros sobrevivieran al viaje.
A pesar de lo absurdo que parece ser viajar para morir, 202.586 personas se inscribieron para la selección. De estas, quedaron 100, que competirán en un reality show donde los 24 vencedores ganarán el viaje. Y entre los finalistas está una brasileña, la profesora Sandra Silva, que afirma: “Estamos consumiendo el 25% más de los recursos que deberíamos consumir del planeta por año. Y usted, ¿piensa que siete billones de personas van a dejar de consumir? No, entonces tenemos que ir a otro lugar.”
Reflexione: ¿abandonar la Tierra va a salvarle?
Pablo, Silvano y Timoteo, en la segunda carta a la iglesia de Tesalónica, se complacían a causa de los cristianos tesalonicenses:
“…por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis. Esto es demostración del justo juicio de Dios, para que seáis tenidos por dignos del reino de Dios, por el cual asimismo padecéis.”
(2 Tesalonicenses 1:1-5)
Así como Jesús afirma que Su “Reino no es de este mundo” (Juan 18:36), los evangelistas se confortaban unos a otros recordando que existen problemas difíciles de ser soportados aquí, pero un lugar mejor les espera más adelante.
Una nave espacial que le libra de los problemas en la Tierra y le envía a la muerte en Marte no le está enviando hacia el Padre, sino al suicidio. La vida en la Tierra es difícil, pero solo un camino conduce a la Salvación, ¿quiere saber cuál es? Participe de una reunión en una Universal más cercana a su domicilio, ingrese en http://universal.org.ar/direcciones para ver las direcciones.
¿Usted también cree que la vida aquí en la Tierra no tiene solución?
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