“Después, cuando la pasión ha concebido, da a luz el pecado; y cuando el pecado es consumado, engendra la muerte.” Santiago 1.15
Existe un gran peligro en codiciar algo que no le es lícito o que pertenezca al prójimo. Esto va en contra de las Leyes de Dios, y esto es un pecado mortal, la separación de Dios por toda la eternidad.