Recuerda que usar sandalias hace que nuestros pies estén expuestos a los efectos del aire, sol y polvo; por lo que les recomiendo exfoliar y aplicar crema hidratante, esto evitará las resequedad y callosidades.
Si tienes tendencia a que se te hinchen los pies por el calor, es importante que todas las noches te des un masaje de abajo a arriba y con movimientos circulares, intenta poner los pies en alto durante la noche colocando una almohada bajo el colchón, al día siguiente estarás como nueva. Los baños de pies ya han ganado un terreno que parece irrenunciable: quince minutos sumergidos en una fórmula natural resulta un excelente remedio para los pies cansados.
Para evitar una sudoración excesiva, tan incómoda en verano, introdúcelos en un recipiente con agua tibia con sal y unas gotas de aceite esencial de Aloe vera. Si tienes la piel muy seca, aplícales un masaje con una crema hidratante y duerme toda la noche con calcetines sin retirar el producto.
Cuando tomes el sol, no te olvides de ponerte el bronceador también en toda la superficie del pie, plantas incluidas. Muchas veces se queman porque nos olvidamos de que los pies están tan expuestos como el resto de nuestro cuerpo.
Micosis
El pie de atleta es una infección fúngica de la piel y la más frecuente de las micosis. Estudios recientes estiman que el 25% de la población de los países desarrollados padecerá este mal en algún momento de su vida.
Los síntomas más comunes son: piel reseca, quebradiza y escamosa en el área afectada. Picazón y ardor; Llagas o ampollas; engrosamiento y decoloración de las uñas.
Higiene y lavado de los pies
• Secar bien los pies después de lavarlos, teniendo especial cuidado entre los dedos.
• Cambiar calcetines y calzado diariamente.
• Utilizar preferentemente calcetines de algodón o lana.
• Utilizar zapatos transpirables de materias naturales en vez de los fabricados con materiales sintéticos.
• Evitar el uso de zapatos apretados y/o gruesos.
• Utilizar zapatillas o sandalias en piscinas, duchas públicas, vestuarios, gimnasios y hoteles.
• Secar los zapatos al sol cuando el clima lo permita, para disminuir la humedad.
• Cuando esté en casa, prefiera calzado que tenga una adecuada ventilación.
• Si con frecuencia camina sin zapatos en lugares públicos, utilice un anti-fúngico en polvo o spray diariamente. No ignore el dolor de los pies, si ocurre de manera constante consulte a un podólogo o a un médico.