Durante mucho tiempo, Marisa padeció de problemas espirituales. Era nerviosa y negativa. Además, sufría por los problemas en el matrimonio, tenía constantes peleas con su marido y llegaron a vivir separados bajo el mismo techo. Su economía también estaba fracasada.
Los complejos y la inferioridad afectaban el interior de Marisa. No tenía ánimo y quería dormir todo el tiempo. No le encontraba sentido a la vida.
Cuando conoció la Universal aprendió a usar la fe y su vida comenzó a cambiar progresivamente. Un día, llegó la Hoguera Santa y aprovechó la oportunidad para sacrificar en el Altar. De esta manera, pudo ver las manifestaciones del poder de Dios en su vida. “Creí en las promesas de Dios”, cuenta.
Hoy, ella es una mujer realizada, tiene el Espíritu Santo, su familia está unida y son felices. Conquistó empresas, vehículos, casas, tiene proyectos y metas. “Lanzarse en el Altar es una decisión inteligente”, finaliza Marisa.
Así como Dios transformó la vida de este matrimonio, también puede transformar la suya. Acérquese a una Universal e infórmese de qué manera participar de la Hoguera Santa en la fe de Abraham.