Aproximadamente seis de cada diez evangélicos creen que los desastres naturales son señales de Dios, según una investigación realizada por el Instituto de Investigación de Religión Pública (PRRI, por sus siglas en ingles) de los Estado Unidos.
Entre los católicos, un tercio (31%) interpretan las últimas catástrofes como el preanuncio del juicio.El estudio, hecho en compañía con la Religión News Service, apunta que el 67% de los evangélicos creen que los desastres son evidencias que la Biblia llama de “fin de los tiempos”, y los demás lo toman como un problema climático.
Para Daniel Cox, director de la investigación del PRRI, los cristianos evangélicos son más propensos a creer que los desastres naturales son situaciones previstas por el Libro Sagrado. Una pequeña parte de los entrevistos asocia los acontecimientos recientes al calentamiento global.
La encuesta se realizó con 1.008 adultos por teléfono entre el 17 de diciembre y el 20 de marzo de 2011.