“Y reprendió Jesús al demonio, el cual salió del muchacho, y este quedó sano desde aquella hora. Viniendo entonces los discípulos a Jesús, aparte, dijeron: ¿Por qué nosotros no pudimos echarlo fuera? Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible. Pero este género no sale sino con oración y ayuno.” Mateo 17:18-21
El ayuno es una herramienta fundamental para que la persona venza los espíritus malignos. Como el Señor Jesús explicó en el pasaje bíblico anterior, hay espíritus que, para que sean derrotados, exigen un esfuerzo mayor de la persona, por medio de la oración y el ayuno.
Al realizar el propósito de ayuno, aumentamos nuestra comunión con Dios. Cuando renunciamos a una necesidad física, estamos transmitiendo un mensaje de que es más importante para nosotros estar en contacto con Dios que con las voluntades de nuestro cuerpo – que simboliza la naturaleza humana del pecado. Generalmente, el propósito más común de ayuno es el de alimentos y bebidas.
Por eso, en varios pasajes bíblicos encontramos referencias de hombres de Dios que ayunaron para alcanzar en Él una victoria. Pues hay luchas que no pueden ser vencidas por medios naturales, son problemas ocasionados por el mal.
El Señor Jesús, cuando estuvo entre los discípulos, dio algunas orientaciones acerca de cómo realizar el ayuno:
“Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.” Mateos 6:17-18
Por lo tanto, el Ayuno es algo íntimo y personal, entre la persona y Dios.
Si usted está en un tratamiento médico y necesita tomar remedios, busque hacer otro tipo de ayuno, o sea, renuncie a otra voluntad natural de su carne. Usted puede dejar de hacer, por un periodo, una actividad de entretenimiento, por ejemplo, la cual simbolizará su renuncia de la carne.
En toda la Universal está sucediendo un propósito especial, que es hasta el día 18 de febrero: el “Ayuno de Daniel“. No deje de participar de este ayuno. Vea qué puede hacer durante este periodo haciendo clic aquí.
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