El quiste en los ovarios es uno de los hallazgos más comunes cuando se evalúa a una mujer en edad fértil, siendo el más frecuente el quiste folicular que se forma cada mes como parte del ciclo menstrual.
Sin embargo, hay quistes ováricos que sí necesitan una evaluación especializada, como por ejemplo los que tienen una parte sólida en su interior, los que miden más de 5 centímetros o los quistes múltiples.
Si una mujer presenta alguno de los siguientes síntomas, puede tener quistes anormales en sus ovarios:
– Tener ciclos menstruales irregulares (que sean largos y pasen de los 35 días).
– Tener una sensación de peso en la pelvis.
– Dispareunia (dolor al tener relaciones sexuales).
– Dolor en la parte baja del vientre.
– Problemas al orinar
– Sensibilidad en los senos.
– Aumento de peso.
En ese caso, una ecografía será la encargada de revelar el tamaño, forma y ubicación concreta del quiste y el ginecólogo definirá cómo proseguir. También se pueden realizar otras pruebas especializadas como marcadores tumorales, para definir si se trata de un quiste benigno o maligno.
Usó la fe y los quistes desaparecieron
Nora Pepe sufría con dolores constantes de ovarios y decidió consultar a su médico. Cuando le hicieron los exámenes, los resultados mostraban un quiste en cada ovario, de 14 mm en el derecho y de 20 mm en el izquierdo.
Esta situación la ponía muy nerviosa, no se sentía bien y eso afectaba todos los demás aspectos de su vida. En la Universal aprendió a usar la fe y perseverando en las cadenas de oración logró que los quistes desaparecieran. Volvió al médico y se realizó nuevos estudios que comprueban el milagro. Hoy, Nora es una mujer muy feliz que disfruta de la salud plena que logró a través de la fe.
Martes a las 8, 10, 16 y principalmente a las 20hs en Av. Corrientes 4070 – Almagro o en la Universal más próxima a su casa.
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