Norma: “Hace unos sábados vine a la reunión de los Casos Imposibles porque hacía 18 años que me salían ampollas en los pies cada vez que tomaban contacto con el agua. Determiné que ese problema fuera solucionado y gracias a Dios así fue, no tengo más ampollas, puedo mojarme sin problemas y no sucede nada”.
Sixta: Estuve muy enferma, desahuciada por la medicina. Me dolía todo el cuerpo, tenía neumonía, no podía mover las piernas porque estaban muy hinchadas, no podía ni caminar dos cuadras porque me agitaba. Haciendo la cadena de los Casos Imposibles me curé. Ya no dependo de nadie para que me ayude, puedo hacer todo sola, estoy sana, fuerte, trabajando, mi vida volvió a la normalidad”.
Ramón: Vine a la reunión de los Casos Imposibles con mucho dolor de cintura, en la zona de los riñones, tenía el oído izquierdo completamente tapado, también tenía problemas de próstata. Gracias a Dios no tengo más dolores, escucho perfecto del oído izquierdo y el médico comprobó que no tengo más problemas en la próstata”.
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