Usted ya debe haber escuchado la frase: «Todos somos hijos de Dios», ¿pero eso es verdad? Cuando consultamos la Biblia, vemos que no es así. A pesar de que Dios creó al ser humano, el pecado (que acompaña el mundo desde el Jardín del Edén) le sacó la condición de «hijo». Incluso, el Señor Jesús vino al mundo exactamente para unir a la criatura con su Creador. Frente a esto, la pregunta que surge es: ¿cómo puede una persona volverse hija de Dios?
¿Qué se debe tener en cuenta?
La condición para que una persona reciba al Espíritu Santo es ser hija de Dios. Para ser hija, debe nacer de Dios, y, para nacer de Dios, debe morir para el mundo. Como está escrito: «Respondió Jesús y le dijo: El que Me ama, Mi Palabra guardará; y Mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él», Juan 14:23.
Muchos se creen hijos de Dios, pero aún poseen el carácter del mundo, es decir, no son hijos. La creencia que hace que una persona se vuelva hija de Dios es la que involucra la entrega incondicional: «Mas a todos los que Le recibieron, a los que creen en Su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios…», Juan 1:12.
Dentro de la iglesia hay nacidos de la carne y nacidos del Espíritu. Los nacidos del Espíritu son los hijos de Dios. Por eso, el hijo de Dios debe ser bautizado con el Espíritu Santo. La importancia de esto es que el hijo permanezca en la presencia del Padre. Muchas personas dejaron de ir a la iglesia porque nunca fueron generadas por el Espíritu Santo.
Si hay algo que el diablo más teme es que uno de sus hijos se vuelva hijo de Dios. Por eso, bloquea el entendimiento de las personas para que no les llegue la luz del Evangelio. A los que ya son hijos les hace lo mismo que al Señor Jesús, intenta sembrarles la duda: «… Si eres hijo de Dios…», Mateo 4:6. Sin embargo, el Espíritu Santo testifica dentro de la persona que ella es verdaderamente Su hija.
Conclusión:
Ante esto, le dejamos una pregunta para que se prepare: si solo el hijo de Dios tiene la conciencia de que es heredero, ¿cómo alguien que no es hijo tendrá esta conciencia? Primero deberá volverse hijo. Es necesario entender que el hijo de Dios tiene derechos, él no necesita pedir, porque tiene acceso directo al Padre. Además, tiene la conciencia del sacrificio, porque fue generado por el sacrificio del Señor Jesús en la cruz.
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