Una investigación publicada por el portal europeo Plus 55 demostró que pasar menos tiempo en el ambiente de trabajo puede ser suficiente para que el empleado trabaje más. ¿Parece contradictorio?
El gobierno sueco patrocinó un estudio para verificar los beneficios de la reducción de la jornada de trabajo por dos horas. Se compararon dos grupos: de profesionales que trabajan 6 horas diarias y aquellos que trabajan 8 horas. Al fin de cuentas, el primer grupo se mostró más involucrado con las responsabilidades diarias que el último, además de tener menos probabilidad de contraer enfermedades. Permanecer largas horas en el trabajo, por lo tanto, no es señal de alto rendimiento.
¿Un falso workaholic?
Probablemente usted ya escuchó por ahí el término workaholic (adicto al trabajo), que indica a alguien que es compulsivo o adicto al trabajo. Pero el hecho de estar atareado no significa que el empleado sea productivo, como muestran los estudios. Independientemente de la jornada de trabajo, el empleado puede adoptar actitudes que lo vuelvan más eficiente en el día a día.
Sea productivo
¿Ya se ha puesto a pensar qué hábitos vuelven su día más improductivo? Tal vez las notificaciones que saltan en la pantalla del celular estén robando su enfoque, o ese video gracioso en YouTube esté haciendo que usted rinda menos, incluso trabajando más. Verificar las novedades en las redes sociales también puede ser más nocivo de lo que se imagina. De acuerdo a un especialista de Wall Street Journal, por ejemplo, al desviar la atención de un enfoque específico, el profesional demora hasta 23 minutos para retomar la concentración.
Vea a continuación algunas sugerencias para evitar las distracciones y ser más productivo:
Estar bien alimentado
Prestarle atención a la alimentación es fundamental. Después de todo, trabajar con el estómago vacío puede hacer que su día no rinda tanto – ¿quién puede concentrarse totalmente cuando está con hambre? Lo ideal es mantener el nivel de glucosa estable, ya que la misma funciona como una especie de combustible para el cerebro. Por eso, es aconsejable consumir pequeñas colaciones entre las principales comidas del día, con una ingestión de frutas, jugos naturales y cereales integrales.
Pausa y organización
Pausas estratégicas durante el período de trabajo son necesarias. Úselas para interactuar con sus compañeros e intercambiar experiencias. También es importante mantener el lugar de trabajo organizado. Después de todo, la organización es sinónimo de agilidad.
Enfóquese
Es importante saber administrar el tiempo y estipular prioridades. ¿Tiene un informe para entregar hoy y ya está poniendo en el papel lo que presentará en la reunión de pasado mañana? ¿Qué le parece desarrollar una actividad primero y después pensar en la otra?
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