Pueden demorar años en crecer, pero están ahí. De acuerdo con estadísticas médicas, los sufren una de cada cinco mujeres aproximadamente, sobre todo aquellas que nunca tuvieron hijos o desarrollaron embarazos muy tardíos. Son los tumores uterinos, un desarrollo anormal del tejido del útero que puede provocar dolor e incluso hemorragias.
Según la medicina, existen dos tipos de tumores, los más comunes reciben el nombre de “miomas” o “fibromas” y aparecen como resultado del desarrollo anormal de las fibras musculares que forman al útero. La mitad de todas las mujeres tiene miomas hacia los 50 años de edad. Se desarrollan muy lentamente, tardando meses y hasta años en alcanzar un tamaño similar al de una pelota de golf. Pueden causar dolor o no, y también pueden ocasionar hemorragias.
Cuando se habla de “adenocarcinoma” se hace referencia al cáncer del útero. En este caso, el tumor canceroso se forma en el revestimiento del útero. Para detectarlo, hay que estar atento a sus síntomas, como un sangrado fuera de lo normal. En esos casos se debe consultar al ginecólogo con urgencia para realizar una serie de estudios que identifiquen el origen del sangrado.
A través de biopsias o ecografías transvaginales el profesional podrá realizar un diagnóstico certero e indicar el tratamiento a seguir.
La fe también cura
Noemí Galeano llegó a la Universal con un tumor ovárico y muchos otros problemas que habían convertido su vida en un infierno. A todo esto se le sumó también una situación económica apremiante, por la cual pasó a vivir de prestado.
Los problemas también afectaron el matrimonio, había agresiones físicas y llegaron a estar separados durante tres meses, aunque vivían en la misma casa.
Cansada de tanto sufrir, deprimida y sufriendo ataques de pánico y desmayos, Noemí intentó suicidarse en varias oportunidades, en una de ellas quiso tirarse debajo del tren y en otra, ingerir pastillas y provocarse una sobredosis, pero no lo logró.
Mirando la televisión descubrió el programa de la Universal y creyó que allí podía encontrar una salida a todo su sufrimiento. Usando la fe y haciendo las cadenas de oración, Noemí fue libre de los tormentos que sufría y también desapareció el tumor que tenía.
Su matrimonio cambió por completo, es muy feliz junto a su familia y da gracias a Dios por la nueva vida que obtuvo a través de la fe.
Martes a las 8, 10, 16 y principalmente a las 20hs en Av. Corrientes 4070 – Almagro o en la Universal más próxima a su casa.
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