La historia que usted conocerá a continuación fue noticia en los últimos días, sin embargo, no fue la primera, ni será la última. Tampoco es un bello romance más de Nicholas Sparks, como el famoso clásico “Diario de una Pasión” que cuenta la historia de Noah y Allie y les arranca lágrimas hasta a los menos románticos.
Es, en realidad, el cierre de una linda y real historia de amor, llena de complicidad, romance, bondad, compromiso y, que le hizo justicia a la vieja frase final de toda ceremonia de casamiento: “¡Hasta que la muerte los separe!”.
Casados durante 65 años, Italvino Possa, de 89 años y Diva Alves de Oliveira de 80 (los dos en la foto), murieron en el mismo hospital el pasado 3 de octubre, con 40 minutos de diferencia.
Él sufría con leucemia desde el año pasado y ya venía enfrentando problemas de salud en los últimos tiempos. Ella estaba tratándose de un cáncer en la vejiga. Como en el hospital ya todos conocían la historia del matrimonio, los dos estaban internados en el mismo cuarto, lado a lado.
Según uno de los nietos, Diva estaba internada desde el mes de abril, pero, el 1° de octubre último, dejó de hablar, su marido fue a verla y quedó muy triste. Llegó a casa y se sintió mal, teniendo que ser internado el día 3 al lado de su amada y de manos tomadas (Foto de abajo).
En la tarde de ese mismo día, él se sintió mal nuevamente, fue socorrido y falleció en otra ala. Como Diva estaba en coma, uno de los familiares le contó al oído el fallecimiento de su marido; 40 minutos después, ella también murió.
Italvino y Diva se habían casado en el año 1949, en la ciudad de Marau, interior de Rio Grande do Sul. Tiempo después se mudaron a la capital, Porto Alegre. Formaron una gran familia. Criaron a diez hijos de los cuales nacieron 14 nietos y 6 bisnietos. Un privilegio para pocos en los últimos tiempos.
No se separaban y mantuvieron el romanticismo por más de 6 décadas. Italvino frecuentemente le hacía regalos a Diva, en fechas especiales, como en los aniversarios de casados.
Según la familia, fue muy justo que los dos fallecieran prácticamente al mismo tiempo. De tan compañeros, ellos nunca lograron vivir lejos uno del otro. Por la ausencia de uno, el otro – con certeza – padecería.
Fueron enterrados juntos en el Cementerio Municipal de Alvoada, en la región Metropolitana de Porto Alegre.
Reflexión
Esta historia de la vida real nos deja una reflexión: ¿Hemos asumido realmente el compromiso de un matrimonio, viviendo con nuestro cónyuge en todas las situaciones y amando verdaderamente, con respeto y complicidad?
Si usted está interesado en saber cómo llevar a cabo su vida amorosa, participe todos los jueves a las 16 y 20 h, en la Terapia del Amor, en Av. Corrientes 4070, Almagro.
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