El multimillonario Dmitri Itskov, de 35 años, sueña en convertirse en inmortal. Fan de la ciencia ficción, está invirtiendo parte de su fortuna en un plan que ideó para tratar de evadir el paso del tiempo.
Itskov quiere utilizar la ciencia para descubrir los secretos que hay en el cerebro humano y, con esto, transferir los datos del mismo a una computadora. “El objetivo es transferir la personalidad de la persona a un cuerpo completamente nuevo”, explica el ruso.
El investigador Ken Hayworth, neurocientífico del Centro de Investigaciones Janelia, en Estados Unidos, cree que el mapeo del conectoma – la compleja red de conexiones entre las neuronas – es la clave para hacer que el hombre sea inmortal, porque, en su opinión, esas conexiones contienen la información que nos convierte en lo que somos.
Pero Hayworth también afirma que esa es una realidad que aún está muy lejos, porque, para tener una idea, para mapear el cerebro de una mosca se necesita aproximadamente 2 años. Con la tecnología que el mundo dispone hoy, mapear por completo el cerebro humano es una tarea imposible.
¿Podemos volvernos eternos?
La muerte del cuerpo no es el fin de una persona, sino el paso a la Vida Eterna con Dios, pero esto es solo para los que luchan por ella.
De acuerdo con la orientación dada por el Señor Jesús descrita en la Biblia, para que una persona alcance la Vida Eterna,debe creer y entregar toda su vida en las manos de Dios:
“De cierto, de cierto os digo: El que cree en Mí, tiene vida eterna.” (Juan 6:47)
El obispo Djalma Bezerra, responsable del trabajo de evangelización de la Universal en Argentina explica, en un texto publicado en el blog del obispoEdir Macedo, que para conquistar la eternidad es necesario que todos estén vestidos con la armadura de Dios. “El cuerpo que se tiene, por más fuerte o lindo que sea, un día se va a acabar.
Cuando eso suceda, y va a suceder tarde o temprano, ¿dónde vivirá su alma por toda la eternidad? Tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos humanas, eterna, que será la habitación celestial para nuestra alma.Sin embargo, como todo en la vida tiene una condición, la condición para dejar esta casa terrestre y vivir en la habitación celestial, es no estar desnudos sino vestidos” explica.
Si usted quiere alcanzar la Vida Eterna con Dios, participe de una reunión en una Universal más cercana a su domicilio y aprenda cómo esto es posible.
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