En una nota reciente, el periódico israelí Mosaf Calcalist habló acerca del Templo de Salomón, en São Paulo, una iniciativa de la Universal, “una iglesia que abraza al mundo, que aspira a acercar a todos los seres humanos al Dios de Israel”, según el periódico.
En un tono elogioso, el periódico reconoció la importancia de las raíces judías para los cristianos, más allá del hecho de que el Templo sea una opción para quienes no pueden salir de Brasil para conocer Israel y que ahora tienen, mucho más cerca, un pedazo del país donde la historia de su fe comenzó.
Lea a continuación la traducción de la nota:
De São Paulo saldrá la Ley
Justamente en Brasil, hace cerca de 1 mes, se inauguró el Templo – una copia exacta del que Salomón construyó en Jerusalén, incluyendo sacerdotes con el pectoral de las Doce Tribus, el Arca de la Alianza y el Altar. Por detrás de este proyecto está Edir Macedo, fundador de una iglesia que abraza al mundo, que aspira a acercar a todos los seres humanos al Dios de Israel, conforme le explica al periódico Mosaf Calcalist. Mientras tanto, el grandioso tabernáculo conquistó políticos y empresarios brasileños, y fieles que oran por la paz de Israel en hebreo.
Casi 3 mil años después de que el rey Salomón construyó el primer Templo sobre el monte Moriah, en Jerusalén, el obispo Edir Macedo reprodujo una réplica del Templo en un barrio de São Paulo, basado en los escritos de la Torá sobre el Templo y en los hallazgos arqueológicos. Fue construido un tabernáculo majestuoso, lujoso y caro: 300 millones de dólares. Fueron comprados 40 terrenos que, juntos, forman uno solo, grandioso. Es una construcción con 74 mil metros cuadrados, que llevó 4 años para ser realizada, con 1,4 mil empleados, aulas para el estudio bíblico para 1,3 mil niños, sillas traídas de España, piedras de Hebrón, estudios de radio y televisión, talits, candelabros y kipás traídos de Israel, millares de luces LED en el techo y estacionamiento para casi 2 mil autos.
La apertura del Templo de Salomón, conforme es llamado, hace 1 mes y medio, contó con la presencia de millares de personas, entre ellas la presidente de Brasil, Dilma Rousseff, visitantes locales y otros, como evangélicos que pertenecen a la Universal. Una orquesta proveyó la banda sonora y el público cantó canciones de adoración a Dios. Obispos y pastores con vestiduras blancas y cintos dorados llevaron sobre una alfombra roja el Arca de la Alianza. Otros tocaron trompetas, como en el antiguo Templo. Un coro de Sudáfrica, los únicos entre el gran público con colores vibrantes, cantaron en inglés y en zulú.
Una presentación mapeada proyectada sobre las paredes de piedra del Templo mostró la historia de los hombres que creyeron, desde Abraham, nuestro padre, hasta la Iglesia Universal, claro. Entonces subió al altar el fundador de la Iglesia y del Templo, el obispo Macedo, con kipá, talit bordado y una barba que había prometido afeitar solamente cuando el proyecto estuviera concluido.
Ahora que el proyecto está terminado, el resultado es una mega-casa de oración, aparentemente la mayor de Brasil y una de las mayores del mundo. Con un largo de 126 metros, un ancho de 104 metros y una altura de 55 metros, el Templo llama la atención desde lejos. Está en el corazón de Brás, en una zona comercial y también en una localización religiosa evangélica de muchas iglesias. Su territorio es mayor que la basílica de Nuestra Señora Aparecida, que es santificada por el papa, y, en Rio de Janeiro, es mayor que el Cristo Redentor, en Corcovado.
La experiencia de Tierra Santa en Brasil
No está mal para una Iglesia joven de 37 años, que comenzó en una glorieta improvisada en el suburbio. Enseguida se mudó al espacio de una pequeña funeraria, y hoy cuenta con 10 millones de fieles esparcidos por el mundo, incluyendo dos comunidades en Israel: Haifa y Tel Aviv-Jafa.
Macedo (69) nació y fue educado como católico. Sin embargo, a los 25 años, comenzó a concurrir a una iglesia evangélica. Estudió teología y religión en instituciones académicas, hasta que su deseo de esparcir la Palabra de Dios era tan intenso que abandonó su carrera de economista en una institución pública y estableció con algunos compañeros la Iglesia Universal del Reino de Dios. Ellos creen en el Antiguo y en el Nuevo Testamento – por lo tanto, cada cristiano es primeramente judío, a partir de lo que surge la relación con el judaísmo y con Israel. Macedo y otros obispos suelen usar kipás y hacer con los talits, atados con elegantes trabas de plata, muchas oraciones habladas en tres lenguas: hebreo, inglés y portugués. Los elementos de la Iglesia son decorados con luces y símbolos asociados al judaísmo. Recientemente, fue realizada una oración en masa a favor de Israel en hebreo, lengua en que el status de la institución aparece en Facebook.
Macedo no suele hacer entrevistas y agregó que, a pedido de Mosaf Calcalist, respondió a algunas preguntas por escrito y, en cada respuesta, enfatizó la unión entre el judaísmo y el cristianismo. “La fe bíblica es una. Usted no puede separar las raíces judías del cristianismo. Jesús y Sus apóstoles eran judíos, y Él no ignoró los principios de la fe judaica. Al contrario, refuerza y complementa lo que Abraham, Isaac y Jacob comenzaron. En Salmos 122:6 es dicho que necesitamos orar por la paz de Jerusalén, y lo hacemos todo el tiempo, en ceremonias y en nuestros programas de radio.”
La decisión de construir una réplica del Templo nació en el corazón de Macedo hace 8 años, cuando visitó Jerusalén. Quería que todos los miembros de su iglesia pudieran caminar por lo menos una vez en la vida en la misma tierra y piedras por donde Jesús caminó. En la entrada del Templo hay un candelabro (menorá) enorme, semejante al que está al frente del Parlamento de Israel. En el patio del Templo fue construido un jardín con 12 olivos, como aquel donde Jesús oró la noche de Su crucifixión, y flameando en la parte de adelante está la bandera de Israel, juntamente con la de Brasil y de otros países donde la Iglesia se encuentra. Construyeron también un museo con la cúpula de cobre que le permite al visitante hacer un viaje a Jerusalén en los tiempos de la Biblia.
“La mayoría de las personas que cree en el Dios de Abraham no tendrá la misma oportunidad de caminar en las mismas calles que testificaron la revelación de Dios”, explica Macedo. “Una réplica del Templo trae un poco de Tierra Santa a Brasil, una atmósfera muy especial. El Templo es una manera de restaurar los principios de la fe bíblica. No es un Templo de la Iglesia Universal, sino un Templo Universal para la humanidad, de cualquier raza y creencia, para quien quiera conocer al Dios de la Biblia y tener una renovación de la fe original.”
Macedo les enseña a sus seguidores la teología de la prosperidad que está en la Biblia, especialmente en el libro de Malaquías. Se encuentra en ese libro un contrato, según el cual, si los seres humanos obedecieran a Dios, Él daría seguridad y conquistas. Perfectamente visto en la sociedad brasileña, que goza de crecimiento económico en los últimos años. Fue creada una nueva clase intermedia que busca una forma de expresar una gratitud por su nuevo status, y la Universal les proporciona la forma perfecta de hacerlo. Los miembros de la clase media ofrendan la décima parte a la Iglesia, y la Iglesia se expande, lo que le permite ejecutar su trabajo entre la población frágil y vulnerable, como personas adictas a las drogas.
La riqueza también es la solución para algunos problemas, claro, y el nuevo movimiento evangélico crece y prospera entre las redes sociales. Con eso también crece la envidia y la ira de otras denominaciones cristianas.
Mientras el Templo original en muchas áreas era solamente abierto a los que ejercían el Santo servicio, aquí, aclaró (el obispo Macedo): “Todos, sin excepción, podrán entrar gratuitamente, todos los que quieran buscar a Dios, en contraste con el antiguo Templo, donde solo el sumo sacerdote podía entrar al Santo de los santos.”
Los seres humanos necesitan este Templo
En Calle Tirtsa, barrio donde se encuentra una de las dos iglesias en Israel, el obispo Aroldo Martins levanta una puerta de hierro ruidosa y enseguida podemos ver que en su interior hay un lugar semejante a una sinagoga de barrio y un pequeño negocio judío para turistas, localizado en la calle Ben Yehuda. En el salón principal, los bancos forrados con un tapizado bordó y un candelabro iluminado. Entre las dos columnas hay un pequeño escenario y, arriba, la frase “Dios es fiel” en hebreo, bajo la cual hay un talit doblado sobre una silla. En el pasillo de entrada, una luz fluorescente en el techo acústicamente protegida. En el área de entrada, dentro de armarios de vidrio, objetos e ítems judíos – candelabros, velas, platos pequeños.
Martins, un hombre alto, de muy buena presencia , con una sonrisa cautivante, comenzó a participar de la Universal en la década de 1980. Hoy, a los 53 años, es obispo misionero viajante que, en sus viajes misioneros, vivió en Estados Unidos, Sudáfrica, América Central, Rusia, Finlandia, Irlanda, Reino Unido y Portugal. Los últimos meses vive con su familia en Rishon Letsion y es el responsable por la Iglesia Universal en Jaffa y en Haifa, concurrida por aproximadamente 80 fieles. Él dice que la puerta está abierta para cualquier persona, de cualquier religión, con cualquier adversidad. En los folletos, vemos la frase “Pare de Sufrir” con su número de celular. “No es una utopía. A través de la fe, sí es posible parar de sufrir”, y añade: “La mayoría de las personas necesita ser oída. Cuando hablan, se sienten aliviadas y sienten que Dios las visitó. Esta es la religión verdadera de Dios, preocuparse por los demás. Eso es lo que significa el Dios de Abraham.”
Cuando él habla de la fuerza de la fe, sobre su fe en Dios y sobre los milagros, su rostro se ilumina. Las raíces de su familia son de España, donde guardaron sus tradiciones judías en secreto. Sus ancestros fueron expulsados a Portugal y, desde allí, se mudaron al norte de Brasil.
De cierta forma, Martins expresa mejor esa mezcla entre el judaísmo y el cristianismo de la cual hablan en la Universal. “Somos una comunidad de cristianos y judíos mesiánicos creyentes en Yeshua (Jesús, como es dicho en arameo)”, dice. “Por eso no queremos competir con la construcción del Templo en Jerusalén y la perspectiva judía de la venida del Mesías, y no tenemos la intención de decir que este es el tercer templo que fue reconstruido y viceversa. Nosotros les enseñamos a las personas a amar a Israel y a la fe judía, y traemos a muchos peregrinos a Israel. ¿Cuál es la mejor manera de preservar los valores de Dios que construir un templo con la arquitectura del templo que Salomón construyó? Él fue el primero, el mayor y más bello de todos. Un camino real para honrar al Dios de Abraham e Israel. Por eso era importante que los objetos y las piedras fueran de Israel, a pesar de que haya sido un gran esfuerzo. Eso tiene un significado espiritual. Aquí es la cuna de nuestra creencia religiosa y la fe en Yeshua.”
Respuestas al periódico Mosaf Calcalist
Macedo también destacó la importancia de la autenticidad de las pertenencias judías. “El simbolismo de la Biblia tiene un profundo significado para quienes quieren aprender sobre la relación entre Dios y la humanidad. Confirmamos cuidadosamente todos los objetos y símbolos de los judíos, fieles a sus raíces. Cada detalle del Templo nos lleva a una verdad espiritual. Nosotros creemos que Dios es Único, y todos estos símbolos expresan la Santidad de Dios y nos ayudan a darnos cuenta de Su importancia en nuestras vidas.”
Cuando la conversación con Martins llega a una etapa de crítica sobre la riqueza de la Iglesia y la riqueza de Edir Macedo, él nos da una explicación sorprendente: “Él no tiene nada, como cada uno de nosotros. La emisora de televisión tiene su nombre, sin embargo no le pertenece. Sus hijos no heredarán nada de él. Nosotros somos 180 obispos y más de 50 mil pastores, y no tenemos bienes personales a nuestro nombre. Vivimos en función de la misión de Dios, y ese es el significado de la Iglesia Universal, del obispo Macedo y del Templo de Salomón. Nosotros no buscamos poder, sino dar una oportunidad para que las personas comiencen una relación con Dios. El templo fue construido para adorar al Dios de Israel. Dios no quiere un templo creado por manos humanas, sino que las personas son las que necesitan al Templo para encontrarse con Él”.
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