«Porque el que Dios envió, las Palabras de Dios habla; pues Dios no da el Espíritu por medida.
El Padre ama al Hijo, y todas las cosas ha entregado en Su mano.
El que cree en el Hijo tiene Vida Eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él». Juan 3:34-36