Blanca y Hugo tenían muchos proyectos cuando tomaron la decisión de casarse. Estaban felices porque soñaban con construir un hogar lleno de felicidad y armonía. Sin embargo Blanca cambió su carácter de forma repentina, su esposo no entendía el porqué y trataba de evitar las peleas que siempre comenzaba ella por sus celos.
Cuando ella quedó embarazada creyó que todo iba a mejorar, pero al contrario cada día estaba más nerviosa y angustiada. El hogar que de sus sueños se destruía lentamente.
Pero cuando entregaron sus vidas en las manos de Dios, todo cambió…
Este domingo a las 9.30, 15 y 18 en Av. Corrientes 4070, Almagro venga a participar de una reunión donde aprenderá cómo cambiar su interior para comenzar una vida nueva.