Después de trabajar durante largos años, todo el mundo desea aprovechar la vida de forma digna y confortable. Para eso, necesita jubilarse con la seguridad de que tendrá condiciones de mantener el mismo nivel de vida de los tiempos en los que estaba activo. ¿Acaso es posible? Los especialistas que participaron del reportaje de Folha Universal garantizan que sí.
Antes de cualquier cosa, no se olvide de que la palabra clave es “planificación”. Este es el punto de partida para quien desea mantener una jubilación tranquila y sin sofocos económicos. Cuanto más temprano empiece a ahorrar dinero o a reservar parte del salario para inversiones, mayores serán las chances de envejecer con ingresos suficientes como para disfrutar todos los beneficios que la disponibilidad de tiempo trae.
“Para cada fase de la vida, las conquistas suceden dependiendo de los esfuerzos y de las actitudes de las personas. La siembra más segura para quien desea cosechar la realización de sus sueños es la formación de un ahorro, guardar siempre un mínimo posible para que pueda invertir en la compra de su auto o de su casa”, explica el economista y profesor José Aguiar, que actúa en la Asociación Brasileña de las Entidades de Crédito Inmobiliario (Abecip). Él destaca la importancia de adquirir conocimiento y bienes propios aun durante la vida profesional. “Dependiendo de la inversión y del esfuerzo que el joven hiciera en su capacitación, mayor será su salario y consecuentemente mayor será su posibilidad de ahorrar”, dice.
La planificación incluye también pensar a largo plazo. Para eso, es necesario invertir en una plan de pensiones privado, para ampliar las reservas económicas. “Las personas que antes vivían hasta los 60, 70 años, hoy viven hasta los 80, 90 años. Son casi 20 años más de vida en los que la persona va a tener que luchar para sobrevivir fuera del mercado de trabajo, o sea, dependiendo de la ‘tan esperada jubilación’. ¿Qué está sembrando usted para el futuro?”, indaga Aguiar.
La falta de planificación puede causar impactos en la calidad de vida que el jubilado tendrá en su vejez. “Para quienes no cuidaron el ‘presente’ cuando era el momento y llegaron al ‘futuro’ sin las condiciones necesarias para una jubilación saludable, lo ideal es cuidar al prójimo sirviendo de ejemplo para que sus hijos y nietos no pasen por las mismas privaciones”, explica el economista, abogado y planificador financiero personal Fagner Marques. La consultora financiera Evanilda Rocha explica que algunas providencias pueden y deben ser tomadas. Entre ellas, permanecer sin deudas, tener una reserva mínima para imprevistos y trabajar hasta cuando sea posible, atrasando la fecha de la jubilación.
Trace metas y cuide su bolsillo
La falta de planificación puede causar diversos impactos. Como consecuencia, puede hacer que el profesional tenga una jubilación con restricción de recursos, que dependa económicamente de familiares o que continúe trabajando aun con edad avanzada. Por eso, comience a planificarse desde ya.
Para garantizar un futuro seguro, comience a ahorrar pronto. De esta forma, es posible conquistar una mayor reserva económica con antecedencia.
Considere la edad con la cual desea jubilarse. Luego, calcule el horizonte de tiempo (años) que le falta para que llegue esa edad. Por ejemplo, si la persona hoy tiene 25 años y pretende jubilarse a los 65, tendrá 40 años para formar sus ahorros y garantizar un futuro confortable.
Hay muchas formar de invertir económicamente en el mercado: renta fija, renta variable, acciones en la Bolsa, bienes raíces, entre otros. Una de estas puede ser la más adecuada para usted. La elección dependerá de la cantidad de dinero que tiene, cuánto necesitará de ese monto, y cuál es el nivel de riesgo que está dispuesto a correr.
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