En la vida en pareja existen dificultades por las cuales es necesario lidiar todos los días para que no se transformen en conflictos que contribuyan al fin de la relación.
El obispo Renato Cardoso afirma, en su blog, que la falta de comunicación entre el hombre y la mujer es un problema serio, que requiere atención de los dos. “Es un mal del ser humano, pero eso no es una excusa para no mejorar. Muchas cosas en su vida pueden cambiar para mejor si usted mejora su comunicación con el otro”, aconseja el obispo.
Sin embargo, advierte que el hombre tiene dificultades en cambiar su conducta cuando se trata de ayudar en la mejora de la relación. “Adquirimos un conjunto de actitudes características de la personalidad que llamamos ‘es mi manera de ser’, como los hábitos alimenticios, la manera de vestir, el sentido de estilo o falta de él, el temperamento, los conceptos familiares, y qué es una familia.”
Pero, si por un lado eso es bueno y nos da la noción de cómo lidiamos con nuestras vidas, por otro, esa actitud puede volver al hombre endurecido y troglodita. “Él se piensa que es el mejor, lleno de sí mismo, y no está abierto a la mejora, algo que es inconcebible para el ser humano que quiere tener éxito en la vida. En realidad, se vuelve un débil, ya que no se abre a nuevas posibilidades.”
Según el obispo, es por eso que muchas mujeres están avanzando más que los hombres. “Normalmente, ellas son más abiertas para esos conceptos. Llega un punto en donde la mujer lo pasa a despreciar al hombre. La situación es tan grave que hoy, muchos chicos se están volviendo ancianos sin nunca haberse convertido en hombres; pasando de niños a viejos, pero nunca fueron hombres, porque no abandonaron las cosas de niño.”
El obispo Renato afirma que el hombre debe volverse un humilde aprendiz. “No tenga vergüenza de buscar ayuda. Elimine la mentira de su vocabulario. Ser hombre es encarar las consecuencias de la verdad. Encuentre una forma para cambiar su manera de ser.”
Vea otros consejos
El psicólogo norteamericano Mark Goulston da otros consejos de hábitos de parejas que viven felices. De acuerdo con el especialista, los hombres y las mujeres que son felices en la relación actúan de una manera diferente de quienes son infelices:
Váyase a la cama junto a su esposa
En el comienzo del matrimonio, ustedes no podían esperar la hora para ir a la cama con su compañera. Con la rutina, eso termina quedando de lado. Las parejas felices resisten a la tentación de ir a la cama en momentos distintos.
Cultive intereses comunes
Con el fin de la pasión, es fácil darse cuenta de que ustedes tienen pocos intereses en común. Ese es el momento en que las parejas felices comienzan a desarrollar actividades conjuntas para permanecer unidas. Al mismo tiempo, no se olvide de cultivar intereses propios; eso volverá la relación más interesante.
Camine de manos dadas o lado a lado
En vez de caminar adelante o arrastrando a su compañera, camine lado a lado o de manos dadas. Las parejas felices saben que es más importante estar junto con sus compañeros que dejarlos a lo largo del camino. Deje a la mujer siempre del lado de adentro de la vereda y no del lado de la calle.
Confíe y perdone
Las peleas y los desentendimientos son cosas comunes. La diferencia está en el momento de resolverlos. Las parejas felices crean patrones de confianza y de perdón en vez de pasar a ser desconfiados y obstinados.
Concéntrese en lo que su compañero hace bien
Las parejas felices prefieren resaltar el lado positivo, por lo tanto, deje de mirar solamente las cosas que su compañero hace mal. Si usted mira lo que él hace bien, siempre encontrará algo bueno. Dependerá de lo que usted quiere buscar.
Abrácense y bésense siempre cuando se encuentren
Nuestra piel tiene una memoria de “buen toque” (amado), de “mal toque” (abusado) y del “no toque” (negligente). Las parejas que dicen “hola” con un abrazo o un beso mantienen relaciones mejores.
Dígale “te amo” y “que tengas un buen día” todas las mañanas
Las palabras dulces y de incentivación son buenas maneras de evitar o aliviar aborrecimientos a lo largo del día, como embotellamientos, largas filas, reuniones aburridas. Dígale más “te amo” a ella y reciba algo muy bueno a cambio.
Realice una verificación de “tiempo” durante el día
Llame a su compañera a su casa o al trabajo para ver cómo le está yendo en su día. Esa es una buena forma de ajustar las expectativas para que usted esté más en sintonía cuando la llame después del trabajo.
Dígale “buenas noches”, independientemente de cómo usted se siente
Eso le dice su compañero que, independientemente de lo enojado que esté con él o ella, aun así piensa en la relación por encima de todo. Dice que lo que usted y su compañero tienen es mayor que cualquier incidente perturbador.
Siéntase orgulloso de ser visto con su compañera
Las parejas tienen el placer de ser vistos juntos y, muchas veces, están en algún tipo de contacto afectuoso – de manos unidas o la mano en el hombro o detrás del cuello. No se están mostrando, sino solo diciendo que se pertenecen el uno al otro.
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