Gonzalo: “A los catorce años me involucré en los vicios del cigarrillo y del alcohol. Sentía un vacío dentro de mí y lo quería llenar con eso. Empecé a ir a los boliches, a tener malas amistades, amanecía borracho, tenía peleas y eso me llevó a tener conflictos con mi familia.
Además, era muy nervioso. Así fueron pasando los años. A medida que transcurría el tiempo, me hundía más en el fondo del pozo.
Tuve una pareja y, al poco tiempo, tuvimos hijos. Había perdido el empleo a causa de los vicios y no podía solventar a mi familia. Para los vicios siempre tenía dinero, pero a mis nenes no les podía comprar lo esencial.
Luego, empecé a tener mucho dolor de cintura y a estar encorvado. Debido a eso no podía trabajar.
Hasta que un día recibí una invitación de mi esposa para participar del Tratamiento de la Cura de los Vicios.
Yo no creía que mi vida podía cambiar, pero perseveré en las reuniones. Al poco tiempo, fui curado de todos los tormentos espirituales y de los vicios. También me sané de la enfermedad que tenía en la espalda.
Hoy estoy restaurado y tengo empleo. Empecé a trabajar por mi cuenta, hoy le puedo comprar a mi nene un vaso de leche y solventar los gastos de mi familia. Soy feliz. Desde hace diez años que estoy libre de los vicios”.
Participe del Tratamiento para la Cura Definitiva de Todos los Vicios, a las 15 h, en la Universal más cercana de usted.
