La neuroteología estudia regiones cerebrales estimuladas por la fe
Desde el siglo 19, se especula sobre la relación entre la espiritualidad y el cerebro humano y si existe alguna parte o función de nuestro cerebro que proporcione una conexión con Dios. Pero, solo a partir de la década de 1990 fue que la neuroteología comenzó a ganar más espacio en el medio científico y, desde entonces, los especialistas han sido publicado estudios periódicamente.
La ciencia de la neuroteología, también llamada neurobiología de la religión y de la espiritualidad, estudia los procesos cognitivos (conocimiento y formas de aprendizaje de un individuo) y las regiones cerebrales que más se destacan durante los momentos de fe.
Anterior a lo descripto, varios investigadores ya habían observado que durante el proceso de oración y meditación, una determinada región cerebral presentaba menor actividad. El lóbulo parietal derecho es responsable de áreas cerebrales dedicadas a la orientación en el espacio y en el tiempo, dos elementos que desaparecen en la experiencia de la meditación y de la oración.
Un estudio reciente del International Journal of the Psychology of Religion apunta que la situación neurológica correspondiente a la experiencia espiritual es compleja e involucra múltiples áreas del cerebro. Esta vez, el lóbulo frontal y también las zonas subcortical, por ejemplo, presentaron mayor actividad durante el mismo proceso de meditación y oración, analizado anteriormente.
Con base en este estudio, la ciencia muestra que existe una función o un uso global del cerebro que actúa como si la espiritualidad fuera algo dinámico que usara diferentes partes del cerebro para su demonstración. Gracias a las investigaciones, ahora hay una confirmación neurológica de cómo es posible alcanzar aspectos muy particulares, sobre el individuo que tiene fe.