Los voluntarios del equipo Socioeducativo de Moreno y San Miguel visitaron a los jóvenes del Centro de Contención Moreno con el propósito de llevarles un mensaje de esperanza y, además, ofrecerles una clase de cocina. Durante la jornada, les enseñaron a preparar chipas, una actividad que los jóvenes valoraron como
una posible puerta hacia futuros emprendimientos. La experiencia en la cocina despertó recuerdos familiares en muchos de ellos, lo que dio lugar a una conversación emotiva.