Tenía deseos de suicidio Desde niña, pero encontró la solución: “Hoy soy feliz”
Romina: “Antes de llegar a la Iglesia Universal, yo sufría de depresión, tristeza, insomnio y pesadillas. Desde mi niñez tenía deseos de suicidio. Siempre tuve ese pensamiento de muerte porque pensaba que todo lo malo que acontecía en mi casa era por culpa mía. Entonces, tenía una voz en mi interior que decía que todo iba a estar mejor si yo me mataba.
A medida que fui creciendo, aumentaron los problemas en mi casa y empecé a tener problemas de alimentación. No comía o lo que comía, lo vomitaba. Eso me llevaba a hundirme más en la depresión.
En mi adolescencia, empecé a tener problemas de complejos. Todo lo que veía en las demás chicas, como un lindo cuerpo o una linda sonrisa, hacía que yo me acomplejara. Yo decía que esas personas eran felices por cómo se veían.
No había un momento de felicidad en mi vida. En esa situación llegué a una reunión de los viernes, gracias a una invitación. Comencé a participar cada semana y fui libre de todo, del insomnio y la depresión. Con el paso del tiempo, me di cuenta de que ya no tenía los pensamientos de muerte, veía la realidad de manera positiva. Hoy soy feliz, gracias a Dios”.
Si los problemas no lo dejan en paz y quiere ser libre de los tormentos espirituales, participe de la Reunión de Liberación a las 8 h, 10 h, 12 h, 16 h y 20 h, en la Universal más cerca de su domicilio.
Si usted quiere comunicarse con nosotros, puede hacerlo llamando al (011) 5252-4070.